Las ventajas en los edificios residenciales

Las ventajas en los edificios residenciales

También en el campo residencial es posible ofrecer un valor añadido a la utilización del sistema domótico con la integración de los diferentes sistemas

Como sector residencial se quiere decir todas las partes comunes dentro de un complejo residencial: es una premisa necesaria para evitar de confundirlo con el sector doméstico, donde la tecnología domótica se extiende al control y manejo total de la vivienda.
La funciones integradas en las partes comunes se controlan de manera directa desde la recepción principal, que monitorea la seguridad de las áreas y su estado 24 horas.
El control de las funciones clásicas como luces y motorizaciones es habitual, y se activan según las exigencias del complejo residencial, tanto para el interior como para el exterior del edificio.
También en el ámbito residencial es posible ofrecer un valor añadido al uso del sistema domótico con la integración de distintos sistemas (video vigilancia, anti-intrusión, video portero automático), y garantizar una mayor seguridad de las áreas y de las personas. Es posible asociar el control de entradas a las luces de cortesía, de manera que se activen cada vez que el residente entra en el garaje para acompañarlo al ascensor o a las escaleras y que se enciendan al alcance del piso. El control de los consumos de las partes comunes permite conseguir un ahorro energético, utilizando por ejemplo lámparas led donde el sistema domótico señala un alto consumo.
Desde la habitación es posible controlar y manejar las funciones activas gracias a un panel PC con pantalla táctil que de la posibilidad de visualizar en tiempo real la situación de las áreas comunes (escaleras, ascensores, garaje y pasillos).
En edificios más grandes como rascacielos, es posible controlar los lugares comunes y de servicio, como por ejemplo el gimnasio o el cine, que el usuario puede reservar desde el software Easydom que tiene en su casa.